Como su nombre indica, tight proviene del inglés cerrado. Esto quiere decir, que el jugador que aplica este estilo de juego en la mesa tiende a participar en pocas manos, aunque siempre que actúa lo hace con mucha fuerza. Para entendernos, se trata de jugar las manos iniciales fuertes y descartar las débiles. Como podemos ver en la clasificación de manos iniciales, una pareja de ases o de reyes es una mano fuerte, mientras que dos cartas bajas sin conectar, como por ejemplo 7-2, es una mano débil.
Algunos jugadores no adoptan en las mesas este estilo y juegan casi cualquier mano. Cuando un jugador participa en muchas manos suele decirse que tiene un estilo loose, lo cual es otra opción a seguir, pero no recomendable para principiantes.
Describe un estilo que supone apuestas y subidas continuas, lo que ayuda a mantener el juego a tu favor. Es muy importante apostar consistentemente cuando lleves la iniciativa. Si el oponente iguala, más dinero irá a parar al bote. Esto es exactamente lo que quieres, pues eres favorito para ganar la mano. Si todos los oponentes se retiran, también es un resultado favorable, pues ya no tienes riesgo de perder la mano. En cambio, si decides pasar, el bote permanece pequeño y das a tus oponentes la posibilidad de que su mano mejore gratis en la siguiente calle.
Ejemplo de una mano jugada con agresividad:
Tienes A♠ K♠ , y tu oponente tiene J♥ 10♥ . El flop viene K♥ 9♦ 2♣ y el bote es de 10$. Tienes la mejor pareja y, por tanto, la mejor mano. Tu oponente tiene una mano débil, pero podría conseguir una escalera si una Q llega en el turn. Compara los tres siguientes posibles resultados:
Algunos jugadores no apuestan si tienen una buena mano, lo que permite a los rivales seguir en el bote. Esto se llama slow play. Sin embargo, hacer slow play o jugar lentamente es, por lo general, un error, ya que casi siempre es mejor forzar al oponente a retirarse, que darle la oportunidad de ganar una mano sin invertir dinero.
Si tienes una mano muy débil, y apuestas esperando que todos los oponentes se retiren, estas echándote un farol o haciendo bluff. La opción de hacer un farol hace del poker un juego muy emocionante. Sin embargo, los principiantes deben tener cuidado y no abusar de ello.
Jugando al Texas Hold’em no puedes ver las cartas de tus oponentes. Es precisamente esto lo que hace al juego mucho más interesante. Es justo decir que, cuanta más información tengas acerca de las cartas de tu oponente, mejor podrás jugar. Nunca podrás saber exactamente qué mano tiene, pero cada vez que un oponente actúa puedes obtener algo de información. Si alguien apuesta es probable que tenga una buena mano. Si alguien iguala, sus cartas no pueden ser tan malas. Si alguien se retira ya no tienes que preocuparte por él.
Si tienes una buena posición en la mesa, siendo la mejor el botón, eres el último en actuar (el significado del termino ‘posición’ puede consultarse en el Glosario). Esto te da la oportunidad de observar las acciones de todos tus oponentes y utilizar esa información para tomar una mejor decisión.
Ejemplo de tener posición:
Estás en el botón con A♠ 10♥ . Esta es una mano decente, pero no hemos de sobrevalorarla. En esta posición favorable puedes observar qué hacen todos los jugadores y actuar de acuerdo a ello. Considera estos dos posibles escenarios:
Los jugadores de poker menos experimentados suelen jugar de manera diferente a las estrategias presentadas en este artículo. Juegan casi cualquier mano (loose), igualan con frecuencia en vez de aumentar o retirarse (pasivo), no tienen en cuenta la posición y no toman ventaja de la información disponible. En la práctica no siempre es fácil jugar tight-aggressive, pero dará sus frutos a largo plazo y, además,te dará una gran ventaja sobre jugadores que jueguen loose y/o pasivo. El siguiente artículo explicará como distinguir buenas manos de malas manos y cómo jugarlas después del flop.